Recuerdos. El bardo dijo que eso éramos. Pero eran tantos. Debía equivocarse. Solo que tenía toda la razón. Recordaba los abrazos. Las sonrisas. Las miradas… …Aquel beso. Eso era él. Tenía que ser él. Nunca más había estado vivo. Realmente vivo. También ahora lo estaba. Porque debía luchar. Luchar por las memorias. Preservar las extintas miradas. El abrigo de aquellos brazos perdidos… …Los mismos labios que alguna vez fueron suyos.
Archivero público de todo lo que alguna vez he escrito y probablemente escribiré... tal vez con una que otra excepción. Por cierto, para ver las entradas, solo debes seguir bajando.